Durante la sesión del jueves me dediqué a observar y hacer fotos más que otra cosa, era de esos días que no consigues que fluya el dibujo y en este caso era imprescindible ya que Javier, el bailarín, no paraba quieto ni un momento. Menos mal que otros compañeros si consiguieron conectar con su movimiento y hacer que la mano les siguiera.
Desde la Escuela de Artes nos trasladamos a la academia de baile ,muy cerquita, donde disfrutamos del baile en pareja, una delicia con instantes hermosos que se te ivan de los dedos.
Solo falto yo, claro.
Poco a poco los compañeros irán colgando sus trabajos en Valladolid DIBUJA.
He descubierto Valladolid Dibuja...algo tarde pero me atengo al refrán...dicha de que se organice, de ver caras conocidas, de la posibilidad de conocer otras nuevas y de felicitarte por el proyecto. Por supuesto...un beso
ResponderEliminarMe han encantado los bocetos, increíbles! Y me encanta la idea de Valladolid Dibuja! La sesión de tango, de un mimo, de danza india!! Ojalá hubiera algo parecido en Barcelona!
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